Sabías...

A modo de bienvenida les dejo el significado de mi nombre y los invito a sumarse con sus textos, cuadros, música y cualquier creación que nos permita enriquecer el alma


Omar


Nombre Masculino de origen Árabe: Que tiene larga vida.

Caracteristicas : Es racional, estable y usa su sentido común para resolver todas las situaciones

que se le presentan. Es generoso y amable con los demás.

Amor : Es leal y detallista con su pareja cuando quiere de verdad.

domingo, 13 de enero de 2013

Palabras en tiempo de epopeyas ¿?



¿Qué pueden sentir, pensar o creer aquellas personas que no tienen nada ni tampoco futuro?
¿Qué pueden sentir, pensar o creer aquellas personas a quienes les arrebataron el futuro?
Hablo de niños y jóvenes; hablo de nuestros mayores que no solo sobreviven luego de una vida entera de aportar al País y que tampoco tienen futuro porque se lo robaron y se lo vetaron bajo el impiadoso manto - oscuro, muy oscuro por cierto - de una epopeya, de acciones épicas que sólo contemplan los intereses de unos pocos.


Por Omar Lillardo Alonso (*)


Breve descripción del significado de Epopeya y Épica
La epopeya es un subgénero épico, escrito la mayor parte de las veces en verso largo (hexámetro), o prosa, consiste en la narración extensa de acciones trascendentales o dignas de memoria para un pueblo en torno a la figura de un héroe que representa sus virtudes de más estima; en ella intervienen muchas veces los dioses y existen elementos fantásticos.

La épica (del adjetivo en griego antiguo ἐπικός (epikos); de ἔπος (epos), "palabra, historia, poema"1) es un género literario en el cual el autor presenta hechos legendarios, elementos imaginarios y que generalmente quiere hacerse pasar por verdaderos o basados en la verdad o lo cierto, o ligados en todo caso a un elemento de la realidad, o ficticios desarrollados en un tiempo y espacio determinados.

Estos son los momentos históricos que nos toca vivir y a los cuales, para quienes tenemos experiencias no tan lejanas en el espacio tiempo, nos cuesta mucho adaptarnos y soportarlos, especialmente la mentira y el doble discurso.

Para quien, como en mi caso, ha accedido al conocimiento de la Comunicación tanto en lo teórico como en lo práctico, les aseguro que el esfuerzo y la prédica cotidiana es realmente importante en el intento de esclarecer ahora y no cuando aparezcan los juicios, como viene ocurriendo con los gobernantes anteriores y sus séquitos desde que recuperamos la Democracia, por los excesos que perpetran aunque se llenen la boca con las supuestas maravillas que vivimos los argentinos.

Como prueba de lo que digo valen estos ejemplos públicos por haber sido, precisamente, dichos y publicados:
“Alfonsín es Dios”
“Menem es el Supremo”
“Cristina eterna”

La invocación a Dios, en el caso de la actual Presidenta, es reciente a través de uno de sus frecuentes alocuciones desde el atril oficial y fogoneada por varios de sus súbditos en distintos ámbitos.

La pregunta es: ¿soluciona los problemas concretos de la gente?
Dicho esto en referencia a los dos casos humanos del extremo de nuestra existencia en esta tierra, los niños y los ancianos.
Pero no es solo responsabilidad de quienes gobiernan sino de toda la sociedad. Es una mentira instalada por los políticos, en general, que el Pueblo solo puede opinar a través del voto. Todos cometemos errores aún con la mejor intención y si alguna decisión de los gobiernos de turno lesiona al conjunto de la comunidad esta puede y debe reclamar: en paz, con respeto y con la debida firmeza.

Es notable el temor que le tienen a la gente. Y eso ocurre cuando sólo están interesados en su propio bienestar sin importarles el resto de las Personas que integramos el Pueblo Argentino. Saben que todo ciclo de mandato tiene un límite de tiempo que, si bien puede variar de acuerdo con la habilidad con que manejen la información, les da “aire” para hacer creer que su impronta va a  quedar en la historia y no se equivocan. Sólo es necesario despertar, hacer oídos sordos a la desmesurada propaganda oficial y exigir que sea juzgados como lo que son: delincuentes, aunque muchas personas ligadas al Poder sean solo mandaderos o mensajeros: su complicidad y su obsecuencia permiten el “robo para la corona”.

Esta ha sido y es la verdadera “epopeya” a la que hemos asistido y aún asistimos los Argentinos. Por lo tanto, sepamos que depende de nosotros, de nuestra memoria y de nuestro coraje cívico modificar una situación que nos agravia, nos enmaraña y oscurece la Vida.

(*) Comunicador Social, Escritor – Director Asociado de Grupo Co.S.M.O. Consultoría y Capacitación Empresarial y Co Editor del Portal Empresarial Estrategia & Negocios www.estrategiaynegocios.com.ar

No hay comentarios.:

Publicar un comentario