El Mensaje más contundente de
la Pandemia del COVID 19 pone en foco algo que, sin ninguna duda,
afecta la Gran Mayoría de los Seres Humanos: la Inequidad. Así, con esta compleja
situación en la Salud y el enorme Frenazo - Recesión en término técnico - en toda la economía del Mundo, vemos más
limpio el cielo y el aire que respiramos, los arroyos y ríos, la manifestación
de los Animales, del mismo modo se pueden ‘oír’ claramente infinitas
expresiones del Cambio en la Economía del Mundo y pareciera, ojalá Así
Sea, que son muchas las Personas que se han dado cuenta que una
abultada cuenta en un banco no les impide morir… como al resto de los Humanos.
Hay conceptos que llaman a
Pensar seriamente en ese Cambio y cómo nos adecuamos al mismo:
El Estado no está solamente
para asegurar los derechos de propiedad y regular los mercados para que
funcione la competencia, como les gustaría a los economistas
anarco-capitalistas. En los hechos, en los países desarrollados, los estados
crean olas de innovación financiando proyectos que el sector privado
normalmente no puede o no quiere encarar por sí solo.
Ante la crisis provocada por la pandemia, la vacuna
que resulte ganadora en la carrera contra el coronavirus, debería reflejar la
sustancial contribución pública a su desarrollo y distribuirse gratuitamente y
con normas de licenciamiento obligatorias que aseguren su disponibilidad para
todos los países, ricos y pobres, dice ahora esta economista.
Allan
Rosenbaum, presidente de la Asociación Estadounidense de
Administración Pública:
En ausencia de iniciativas del gobierno para apoyar
industrias como las aerolíneas o los semiconductores, muchos exitosos y ricos
estadounidenses no serían tan exitosos ni ricos”
Miami Herald
Estos conceptos son opuestos al * Anarcocapitalismo, una corriente económica
del liberalismo surgida a mediados del siglo XX. Según el anarcocapitalismo,
para que exista libertad en una sociedad, es necesario que esta se asiente
sobre un sistema de libre mercado.
Habrá que ver, entonces, como
se reorganiza el futuro esquema de Gestión, cuáles serán las Políticas
Públicas, las Obligaciones de los Estados en la Atención a los Ciudadanos, las
Relaciones entre Estados y su Organización Internacional, entre los principales
temas.
Mientras tanto, provocado por esta Pandemia, los hechos
cotidianos, en todos los ámbitos laborales, están revelando el cambio que,
inexorablemente, ya está instalado en las costumbres.
Es cierto que muchas de ellas no podrán adaptarse: por su
edad; por la ausencia de formación técnica
en general; por desinterés y, en mayor grado, por la desidia del Estado para
proveerles esa posibilidad y que, en algunos casos – principalmente con los
jóvenes en escuelas técnicas/tecnológicas – todavía puede
hacerlo. Pero esa adaptabilidad debemos hacerla realidad, nos guste o no, porque
el uso de la Tecnología ya forma parte de todos los procesos y avanza a una
velocidad que altera todas las capacidades de comprensión.
En ese mismo ítem debemos considerar la fragilidad actual,
ya que el uso intensivo de la Tecnología – y a eso se apunta en la 4ª Revolución Industrial o revolución
tecnológica– permite comprobar que
nos han vendido y cobrado un Sistema que, puesto en operaciones masivas,
muestra solo un enorme déficit que no se condice con el Servicio
y, por consiguiente, con su Costo que, de esta manera, resulta injustificado y
excesivo.
Estas mismas características
deberán considerarse cuando se reevalúen los Servicios que ‘Brinda’ el Estado
que, sin ninguna duda, están muy lejos de lo que se les ‘Impone’ a las
Ciudadanas y Ciudadanos.
No es una tarea simple pero, tomando
en cuenta las conductas observadas –
por conciencia social o por imperio de las circunstancias –, se puede Pensar en Conservarlas y Adecuarlas a los nuevos
escenarios Socio-Laborales buscando el equilibrio que permita una Convivencia
Equilibrada.
El Esfuerzo requerido para optimizar
estas Conductas será, sin ninguna duda, mucho menor al que se ha realizado para
lograr buenos resultados ante la Pandemia y deberá basarse en reiterar y
aprehender que se trata de un logro Socio Comunitario.
Pensando en el Nuevo Escenario de la Economía Mundial, es
bueno tener en cuenta a los ‘Clientes’, ya que, hasta ahora, están Matando a la
Gallina de los Huevos de Oro, señalado el mencionar los malos Servicios que
tenemos. Por eso, sigo preguntando:
¿Quién
va a Comprar lo que Produce el Robot?
* Mariana Mazzucato es una economista, con doble nacionalidad
estadounidense e italiana. Es profesora en la Economía de Innovación y Valor
Público y directora del Instituto para Innovación y Propósito Público en
University College London y el RM Phillips Chair en Economía de Innovación en la
Universidad de Sussex.
Educación: La Nueva Escuela de Investigación Social (1999), La Nueva Escuela de
Investigación Social